Comenzamos el ciclo lectivo con el clima de los ¡¡ Festejos del Centenario de la Escuela !!
Aprovechando una situación casual, que uno de los papás de un alumno de 1er año se encuentra trabajando en la Base Antártica de Argentina, se nos ocurrió realizar una video-conferencia en el Acto de incio del ciclo lectivo.
Gabriel Bertoli (el papá) grabó un precioso video, para tener como plan B por si fallaba la conexión. (Es el video con el que inicio este comentario).
Como nos encantó el video en el acto de hoy por la mañana, pasamos el video y luego pudimos hacer el enlace de video-conferencia (via Skype) y tenerlo "presente" de alguna forma entre nosotros.
Fue un momento muy especial, que disfrutamos todos, los de acá y tambien Gabriel desde allá.
Esperamos poder continuar en esta linea y tener una video conferencia con los ex-alumnos en el exterior, pero eso será para el acto de los Festejos del Centenario (en Mayo).
¡¡ A Festejar !!
Un abrazo
Carlos
Ese día estuve en la escuela, tenía mesa de examen y - antes de subir- formé parte del acto de inicio para 1º año.
ResponderEliminarPensé y sentí muchas cosas: me conmoví con las palabrasaliento, me llené de emoción con tan solo ver a los chicos en las filas:
expectantes, con fuerza, con ganas.
Recorrí los rostros de los padres que tanto hacen y que - con justa razón- tanto esperan de las escuela pública que todos intentamos defender y hacer crecer.
El papá del video me conmovió por las distancias y los espacios, pero - sobre todo- porque vi a un papá que con su cariño infinito estaba tomando la palabra en la escuela. Pensaba, entonces, como las nuevas tecnologías en este caso no solo acortaron la distancia física, sino que abrieron un espacio de diálogo bello, simple y genuino. Ojalá- como comunidad educativa - podamos seguir generando espacios para compartir la voz, para escucharnos, para hacer circular nuestras palabras y- con ellas- mensajes, ideas, deseos, proyectos y más...mucho más...
Para mí, hoy en el acto, las nuevas tecnologías entreabrieron la puerta y entró esa luz.
Gracias a los que lo hicieron posible.
Hasta pronto, un gran abrazo, Gabriela